A la princesa Guanahani se le revela el destino, una imagen del pasado se le apares en su presente, es un hombre joven, guapo y muy elegante. Ella cree que es el hombre de su vida el que la convertiría en reina, el que cumplirá la profecía de la leyenda, el príncipe con la fuerza del dragón.
La princesa aunque es fuerte de mente tiene el corazón débil, no puede hacer que el príncipe la sienta, el príncipe tiene corazón fuerte pero mente débil, y no escucha a su princesa, devén aprender a conectarse y unir sus almas, devén cumplir con lo que el destino les tiene prometido. Pero los enemigos del destino, los que no fueron elegidos, asecharan sus mentes, confundirán sus sueños, debilitarán sus deseos.
Guanahani sufre por no tener la fuerza que tiene el en su corazón y a gritos con lagrimas en los ojos con el color del coraje, le reclama a gritos a los dioses
-por que no me dieron un corazón mas fuerte... mi amor se me aleja no me siente, pensara que no lo quiero, por que no le asen entender que lo amo y lo deseo? por que él no mantiene su deseo hacia mi? dioses para que me protegen tanto si yo no puedo protegerlo con mi corazón, para que mi brillante mente si el no la escucha no la ve no la entiende.
-Tengo dolor tengo angustia, digan me dioses... cuanto durara esto, cuanto tiempo la impotencia y el desespero? acaso estoy equivocada de príncipe, no es él mi destino el no es lo que yo creo? el no es el que me ara reina, el que será mi mejor amigo, estoy equivocada de hombre? no es el que me cuidara, no es el que yo deba cuidar?
La princesa se quedo llorando por lo incierto de los hechos, bajo la lluvia que acariciaba su rostro y sentada frente al parque del lago. Se quedo dormida de tanto llorar. Estaba oscureciendo y su amigo el lagarto verde la levanto la acompaño asta la casa y se regreso al lago.
Guanahani cae rendida en su cama quedando total mente dormida. En la madrugada se escucha un trueno tan fuerte y tan luminoso que la izo despertar, pero en minutos quedo nuevamente dormida, ve una imagen de un ser luminoso con doble vos diciendo
-detrás del éxito de un hombre hay una gran mujer, un hombre solo quiere compañía, hay dos caminos, ellos lucharan por ti, el destino esta escrito, el destino puede cambiar.
La princesa cerró las ventanas de su cuarto, quedo desvelada, y a oscuras con los ojos abiertos en su habitación y sin ánimos de querer pensar.
